Temple al huevo.

Primeras capas de Temple.

Temple al huevo finalizado.

Esta técnica ha sido una de las que mas me ha gustado y mas he disfrutado. 

Es un trabajo lento, hay que dar varias capaz para que el color al secar no se traquele, y cada capa tiene unos tiempos de secado.

Hemos utilizado un tablero dm de 30x40cm, que imprimamos con el gesso que hicimos nosotros mismos. 

Tuvimos que dar tres capas de imprimación cruzadas, lijando cada una de ellas, para que quedara bien y no se formaran pegotes. 

La imagen que elegí la encajé a ojo, y una vez dibujada en el tablero, se empieza con la mezcla del temple.

Para hacer el temple utilizamos huevos, aceite de linaza, agua destilada y pigmentos de colores.

Es sencillo de realizar, pero el aceite de linaza huele muy mal, así que a veces es un poco desagradable.

Una vez que tenemos la mezcla se hecha muy poco pigmento, porque este tiñe enseguida, pero hay que dar varias capas.

Lo malo de este trabajo es que a veces al aplicar la pintura en el bastidor, esta misma va desapareciendo, y tienes que dar muchas pinceladas hasta que coge bien el color. 

A pesar de que es un trabajo largo y que requiere paciencia, ha sido de los que mas me ha gustado, y en general los resultados han sido buenos.